Google vs COVID-19: la empresa transformará
oficinas en centros para distribuir la vacuna
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Los ecosistemas estratégicos son susceptibles de
sufrir estos eventos. Prevenir es una tarea de corresponsabilidad.
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El Distrito hace un llamado a la ciudadanía para
que no arroje colillas, ni residuos y no realice fogatas en los ecosistemas de
la ciudad.
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Los incendios forestales deterioran la calidad del
aire y pueden afectar la salud de los bogotanos.
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Si alguien observa una columna de humo o llamas,
debe informar de inmediato a la Línea 123.
Bogotá, 29 de enero de 2021. (@AmbienteBogota). En los últimos
días, los organismos de socorro y las autoridades ambientales han estado en
alerta por la posible ocurrencia de incendios forestales, debido a las altas
temperaturas que se han presentado en Bogotá y que habitualmente aparecen
durante el trimestre inicial de cada año, cuando es la primera temporada de
menos lluvias.
“Las bajas precipitaciones, el calor y las condiciones secas en nuestro
entorno natural, pueden llevar a que haya mayor cantidad de incendios, como
usualmente los hay a comienzos de año. Es muy importante que toda la ciudadanía
siga las recomendaciones que dan las autoridades para evitar este tipo de
emergencias y reporten a la Línea 123 si ven alguna columna de humo”, aseguró la secretaria
de Ambiente, Carolina Urrutia.
Las altas temperaturas, sumadas a comportamientos inadecuados de algunas
personas, han generado incendios forestales en diferentes ecosistemas de la
ciudad. Por esta razón, el cambio de hábitos es la principal acción que debe
adoptar la ciudadanía para prevenir y mitigar este tipo de eventos y proteger
el ambiente de la ciudad.
La Secretaría de Ambiente hace un llamado a las personas para que se
abstengan de realizar fogatas, arrojar colillas y residuos en los diferentes
ecosistemas de Bogotá, especialmente en aquellos que hacen parte de la
Estructura Ecológica Principal.
“Invitamos a las personas a no arrojar colillas al suelo (ni en la calle
ni en los bosques ni en ningún entorno), para evitar cualquier riesgo. Si
realizan recorridos por los cerros o humedales, recuerden que está prohibido
hacer fogatas en estos entornos. Evitémoslas por completo”, agregó la
secretaria Urrutia.
En los últimos días, se han presentado algunos conatos y varias quemas
e, incluso, se presentó un incendio forestal en la Reserva Forestal Protectora
Bosque Oriental de Bogotá, en la localidad de Usaquén, que afectó cerca de
cuatro hectáreas de vegetación nativa, de porte arbustivo.
Así mismo, en 2020, en Bogotá se presentaron 17
incendios forestales que afectaron 83,57 hectáreas. Estos eventos generaron un
impacto negativo en los ecosistemas y la calidad del aire de la ciudad.
Además, los incendios forestales causados de
manera accidental, intencional, afectan la flora, fauna, el suelo, agua, la
calidad del aire y salud de las personas. Proteger estos recursos es una tarea
de corresponsabilidad de los ciudadanos, quienes día a día se benefician de los
servicios ambientales.
Durante los últimos cinco años, se han
presentado varios incendios forestales en Bogotá, de los cuales, nueve de ellos
han sido de gran complejidad y han dejado 264,53 hectáreas afectadas en las
localidades de Fontibón, Bosa, San Cristóbal, Ciudad Bolívar, Santa Fe y
Sumapaz.
Atender un incendio forestal requiere esfuerzos
humanos y el empleo de amplios recursos (incluidos presupuestales). Además, el
costo para iniciar el proceso de recuperación del área afectada es demasiado
alto, sin contemplar el valor del mantenimiento y la pérdida de biodiversidad.
La valoración económica y ambiental de daños ocasionados por incendios
forestales ocurridos años anteriores es cuantiosa.
La Secretaría de Ambiente constantemente
realiza acciones de restauración ecológica para el restablecimiento de la
cobertura vegetal y garantizar una adecuada función de los ecosistemas.
Por lo anterior, las acciones de prevención y
mitigación que se implementen contribuirán a evitar o reducir emergencias por
incendios forestales y/o contaminación del aire.
Bomberos de Bogotá implementa
acciones de prevención
Por su parte, y para realizar un trabajo
coordinado entre las entidades del Distrito, el Cuerpo Oficial Bomberos de
Bogotá ha dispuesto un plan de contingencia, que incluye labores de
conocimiento de los incidentes presentados para contemplar variables recurrentes;
campañas permanentes de prevención hacia la ciudadanía; y acciones anticipadas
de reducción y manejo de las emergencias.
Para esto Bomberos Bogotá ha destinado sus
recursos técnicos y humanos, haciendo recorridos diarios por los cerros orientales
y cobertura vegetal, con el fin de realizar detección temprana de columnas de
humo y/o reconocimiento de la jurisdicción forestal, identificando vías de
acceso, caminos carreteables, fuentes hídricas, torres de energía, antenas de
comunicación y ubicación de posibles puntos de observación.
Así mismo, la entidad cuenta con salas de
monitoreo permanente, de operaciones y despacho, 17 estaciones y más de 600
bomberos para la atención de incidentes que pongan en riesgo la fauna y flora
de la capital.
Diego Moreno, director de Bomberos Bogotá,
afirma que “En menos
de un mes, ya hemos atendido 35 incidentes forestales. Por esto, y para
prevenir más emergencias que afecten nuestros ecosistemas, se hace
indispensable que la ciudadanía evite hacer fogatas, quemas de residuos u otros
elementos; de igual manera, no arrojar basuras, colillas de cigarrillo,
fósforos y botellas de vidrio en lugares naturales como nuestros cerros”.
Acciones para evitar incendios forestales:
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No arrojar colillas ni fósforos encendidos al suelo.
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No tirar residuos que puedan favorecer la ocurrencia de incendios
forestales.
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No encender fogatas en cerros, humedales, parques o
quebradas.
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No ingresar automóviles o motocicletas en zonas donde hay matorrales
secos.
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No realizar quemas agrícolas, de basuras o material vegetal.
Recomendaciones generales para tener en cuenta si se está cerca de un
incendio forestal:
1. Estar atentos y hacer
seguimiento a los niños, niñas, adultos mayores y personas con enfermedades de
corazón, pulmón y oculares.
2. Mantener, en lo
posible, puertas y ventanas cerradas, y cubrir las rendijas de ventilación con
trapos húmedos.
3. No acercarse al área
del incendio para evitar la inhalación de humo. Cubrir la nariz y boca con
tapabocas o un pañuelo húmedo.
4. En caso de tener
problemas respiratorios, dolores de cabeza, debilidad muscular, tos, dolor de
garganta, alteración del pulso o mareos, consultar con el médico.
5. Estar atentos a
información oficial de las autoridades.
