Cundinamarca se perfila como el destino preferido de muchos ciudadanos que buscan en el departamento opciones para descansar, comer o hacer turismo cumpliendo con los protocolos de bioseguridad para estas fiestas decembrinas. Pero el llamado desde el departamento es a continuar con las medidas de autocuidado para la prevención del covid-19
Las diferentes opciones para hacer turismo y la cercanía a la capital son algunas de las razones que motivan a los ciudadanos a visitar los diferentes municipios, ayudando así a lograr la reactivación económica y el turismo.
Según informó la Gobernación de Cundinamarca, están desarrollando una serie de incentivos, capacitaciones, acompañamientos, visitas y demás que “de alguna forma subsanan el descalabro económico que se presentó durante este año, y de esta forma aumentar la calidad en la prestación del servicio y de las instalaciones”.
Para Guillermo Gómez, presidente de Acodres (Asociación Colombiana de la Industria Gastronómica), que reúne 10.000 establecimientos en el país, el reporte de Cundinamarca es bueno porque la actual situación “ha movido a muchas personas de Bogotá a las zonas rurales, y Cundinamarca es el principal receptor de ese flujo de gente. Ese desplazamiento ha beneficiado el consumo en restaurantes y hoteles”.
Pasamos de estar en ceros a un lleno casi completo durante un poco más de dos meses en el municipio y la región
CEBOOKAdicionalmente, han notado una preferencia por hacer eventos en restaurantes campestres y amplios y gran parte de la oferta gastronómica de Cundinamarca ofrece dichos espacios. También se están moviendo los matrimonios y eventos corporativos con el aforo permitido y cumpliendo con los protocolos de bioseguridad, haciendo que Cundinamarca se visibilice como un destino seguro.
“El cierre que se dio durante la pandemia generó la destrucción de, por lo menos, 290.000 empleos en el sector y la desaparición de 48.000 establecimientos gastronómicos (el 52 % del sector)”, afirmó Gómez, y añadió: “Estamos esperanzados de lograr una recuperación en los próximos meses si no vuelven a cerrar, para que los negocios puedan alcanzar el pleno de sus ventas el próximo año: salir de deudas acumuladas y recuperar el ritmo, ya que el crecimiento ha sido constante”.
La oferta gastronómica y los productos típicos, como los de Villeta, también incentivan la reactivación del turismo
Foto: Gobernación de Cundinamarca.
Igual ilusión comparte Jaime Bautista, gerente de Bajo el Cielo Glamping, quien explicó que luego de cinco meses sin actividad, Guatavita se convirtió en uno de los destinos preferidos, sobre todo para hacer glamping.
“Pasamos de estar en ceros a un lleno casi completo durante un poco más de dos meses en el municipio y la región”,dijo Bautista. Además, medidas implementadas por el Gobierno, como la eliminación del impuesto del IVA en el hospedaje, “para nosotros ha sido muy importante, ya que esto nos ha ayudado para la reactivación y lo que sigue motivando a la gente a tomar vacaciones”, añadió.
La Gobernación de Cundinamarca explicó que el departamento está listo para recibir a familias, visitantes y viajeros con un amplio abanico de planes y actividades (rafting, canopy, senderismo, biciturismo, avistamiento de aves, entre muchas otras), ofrecidas por empresas que promocionan los atractivos turísticos, cumpliendo con las medidas de bioseguridad.
“Desde la administración departamental buscamos incentivar el turismo, a partir de las tipologías que se desarrollan y que le impregnan un sello de identidad a Cundinamarca, y donde el visitante podrá conocer y vivir experiencias, disfrutando un turismo de aventura y cultural; otra alternativa es el gran potencial gastronómico”, declaró la gerente del Instituto Departamental de Cultura y Turismo (Idecut), Luisa Fernanda Aguirre Herrera.
Estamos esperanzados de lograr una recuperación en los próximos meses si no vuelven a cerrar, para que los negocios puedan alcanzar el pleno de sus ventas el próximo año
Precisamente, existen cuatro rutas turísticas (ver recuadro) que muestran las diferentes ofertas. Una de estas rutas es la del agua, de la que hace parte la región del Guavio, porque allí se encuentran nacimientos, ríos, fuentes de agua y, por supuesto, la represa del Guavio.
La hacienda La Leona (birdwatching), ubicada en Ubalá, hace parte de la provincia del Guavio, y ofrece a sus visitantes actividades como avistamiento de aves, senderismo, caminatas, gastronomía local y regional y paquetes con guianza turística especializada (bilingüismo).
“Desde el comienzo de la pandemia hicimos un alto en el camino, pero logramos reactivarnos desde octubre atendiendo pequeños grupos de turistas (de 3 a 6 personas). Sin embargo, decidimos atender en esta época decembrina solo a familiares o amigos porque son fiestas para estar en familia”, explicó Lucy León Correal, representante legal de la hacienda.
Desde el comienzo de la pandemia hicimos un alto en el camino, pero logramos reactivarnos desde octubre atendiendo pequeños grupos de turistas (de 3 a 6 personas)
El municipio de Choachí también hace parte de la Ruta del Agua y entre sus principales ofertas está la cascada La Chorrera (la más alta del país), la cascada del Gorila, aguas termales como las de Santa Mónica, y lagunas como la de Tebia y Ubaque. Su ubicación estratégica permite pasar en una hora de lugares tan fríos como el páramo de Cruz Verde (que hace parte del páramo de Sumapaz) a lugares calientes como el río Blanco con sus aguas termales.
“Nuestra estrategia es el turismo verde: de no tener tanto contacto físico con la gente sino con la naturaleza, las cascadas, los frailejones y los miradores. Los recorridos son largos, por lo que no hay aglomeración de gente”, explicó Alfonso Parrado, director de Turismo de Choachí, quien además resaltó que casi el 100 % de sus habitantes dependen del turismo para sobrevivir.
Las cuatro rutas turísticasTurismo de aventura, cultural e histórico son algunas de las opciones que ofrece el departamento.
Foto: Gobernación de Cundinamarca
Cundinamarca tiene cuatro rutas turísticas que buscan cubrir la mayor parte de la oferta del departamento.
- Ruta del Río: tiene como especialidad el agroturismo, aviturismo, ecoturismo, biciturismo y un componente cultural e histórico. Comprende los municipios ubicados desde Soacha hasta Girardot y algunos de la provincia de Tequendama.
- Ruta Dulce y de Aventura: con actividades relacionadas principalmente con el turismo de aventura y que tiene como corredor los municipios que van desde Facatativá, El Rosal, La Vega, Nimaima, Villeta, Guaduas hasta Puerto Salgar.
- Ruta del Agua: tiene una vocación hacia el ecoturismo y su eje está en los municipios de Fúquene, Choachí, La Calera, Guasca, Junín y Gachalá.
- Ruta del Dorado: su gran atractivo es el turismo cultural e histórico, especialmente desarrollado a través de los municipios de Sabana Centro y de Almeidas, al norte de Bogotá.
Cundinamarca cuenta con 1.453 establecimientos de alojamiento con su debido Registro Nacional de Turismo –RNT– (hoteles, viviendas turísticas y de otros tipos); el 6,5 % del total de los registrados en el país.
Con el objetivo de reactivar las actividades que prestan, y dando cumplimiento a las medidas de bioseguridad, los alojamientos vienen trabajando en dos frentes: el primero, con el grupo de empleados y su cadena de proveedores, y el segundo, en la atención a los turistas y visitantes.
Las medidas comprenden el lavado de manos permanente, uso de tapabocas, distanciamiento físico, limpieza y desinfección general, uso de mascarillas por parte del equipo de empleados, buenas prácticas en la manipulación de alimentos, cuidado en la manipulación de basuras, desinfección permanente de áreas comunes y de habitaciones antes, durante y después de su ocupación, así como restricciones y protocolos en áreas comunes.
Según informó la Gobernación de Cundinamarca, el departamento fue uno de los primeros en prepararse para atender la emergencia sanitaria, generada por el coronavirus. Por ello pasó de tener 139 a 739 camas de cuidados intensivos y aumentar de 160 a 224 camas de cuidados intermedios.
Cundinamarca reactivó el turismo, con bioseguridad, pero invita a los visitantes a no bajar los cuidados frente al covid.
Foto: Gobernación de Cundinamarca
De otra parte, dispuso de cinco centros hospitalarios especializados ubicados en lugares estratégicos del departamento para atender los casos de covid-19: clínica San Rafael Dumian de Girardot y los hospitales Regional de Zipaquirá, San Rafael de Facatativá, San Rafael de Fusagasugá y Cardiovascular del Niño de Cundinamarca, en Soacha.
Cuenta, además, con el hospital de alta complejidad La Samaritana, cabecera de la red departamental, ubicado en Bogotá.
Si se encuentra de turismo, no baje la guardia con las recomendaciones de bioseguridad, y en caso de necesitar atención ante posibles síntomas de covid-19, lo primero que debe hacer es llamar a su EPS o a los centros de salud del municipio que está visitando.
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