El auge de compras de segunda mano revoluciona comercio minorista
Cuando escuchamos la frase «compras de segunda mano», es posible que nuestra mente se dirija automáticamente a tiendas para personas con un presupuesto limitado. Sin embargo, la reventa de bienes, especialmente ropa, ha evolucionado para transformarse en una poderosa fuerza en la industria.
El auge de las compras de segunda mano revoluciona comercio minorista, también conocido como retail, para impulsar la sostenibilidad en una industria que históricamente ha sido considerada poco respetuosa con el medio ambiente, de acuerdo con Triple Pundit.
El auge de la reventa y su impacto positivo
Las prácticas de reventa, conocidas como re-comercio, están generando cambios en el sector minorista. Durante el Big Show de enero de 2023, se estimó que el mercado de la reventa alcanzaría los $300 mil millones para 2031.
Además de las tiendas de segunda mano y consignación, marcas reconocidas y pequeños comerciantes han experimentado un crecimiento significativo en la reventa a gran escala.
Marcas como Shopify se han involucrado en el mercado de la reventa para satisfacer la creciente demanda y abordar la preocupación por la sostenibilidad. Esto ha permitido a los comerciantes llegar a un público más amplio y expandir sus negocios.
La reventa está revolucionando el comercio minorista al ofrecer una combinación de productos nuevos y vintage, como lo demuestra el caso de American Eagle y su tienda AE/RE en asociación con ThredUp.
Esta plataforma en línea ha permitido a estos comerciantes llegar a un público más amplio y expandir sus negocios de manera significativa, lo cual ha hecho que la reventa sea más accesible y atractiva para los consumidores.
Segunda mano revoluciona comercio minorista
Para comprender mejor este fenómeno, Tasha Reasor, vicepresidenta sénior de marketing de Loop, una aplicación de gestión de devoluciones en la plataforma de comercio electrónico Shopify, comparte su experiencia y apreciación al respecto.
Reasor compara el cambio hacia la reventa con el atractivo de las tiendas outlet de fábrica, que inicialmente ofrecían descuentos en productos no vendidos. Ahora, las devoluciones se consideran una oportunidad para volver a comercializar productos que aún son viables en lugar de desperdiciarlos.
Según ella, estas nuevas prácticas no solo aumentan los márgenes de beneficio de las marcas, sino que también promueven un comportamiento más sostenible y una Responsabilidad Social Empresarial (RSE) más sólida.
Un ejemplo destacado es American Eagle con su tienda de reventa. Esta tienda ofrece una combinación de artículos nuevos para la reventa y ropa vintage de décadas pasadas, lo que proporciona una experiencia emocionante para los consumidores que disfrutan de la búsqueda de gangas y de artículos de calidad con un toque nostálgico.
Un nuevo comercio minorista de segunda mano
Pero si bien Reasor sugiere que existen varios factores que impulsan que segunda mano revoluciona comercio minorista, como el auge de las compras en línea y los influencers sociales, también han surgido desafíos con el aumento de las devoluciones. Los minoristas y las marcas han tenido que encontrar formas rentables de gestionar estas devoluciones sin comprometer el compromiso y la lealtad del consumidor.
«Amazon durante años ha tenido la opción de ‘compre nuevo, compre viejo, compre usado».
Tasha Reasor, vicepresidenta sénior de marketing de Loop.
Para entidades más pequeñas, como muchos de los comerciantes en Shopify, el mundo en el que operan Reasor y Loop en asociación con Arrive, las plataformas facilitadoras brindan un campo de juego más nivelado en la reventa y la gestión de devoluciones.
La sostenibilidad detrás del auge de segunda mano
Para la vicepresidenta sénior de marketing de Loop, otro factor que ha influido con gran fuerza en que la segunda mano revolucione el comercio minorista es, sin duda, la sostenibilidad. Los consumidores buscan hábitos de consumo más amigables con el planeta. Un número cada vez mayor de personas considera la sostenibilidad al comprar productos de segunda mano.
Lo anterior coincide con una encuesta de IBM realizada en septiembre de 2021, que señala que el 44% de los consumidores elige productos y marcas basándose en su alineación con sus valores. Esto significa que el aumento de consumidores conscientes está revolucionando el panorama del retail.
En este contexto, el comercio de segunda mano tiene un gran impacto en la sostenibilidad. La producción de nuevos productos requiere cantidades significativas de recursos naturales, como materias primas, energía y agua. Al reutilizar productos existentes y prolongar su vida útil, no es necesario utilizar todos esos materiales y recursos.
Según McKinsey, más del 70% de las emisiones de gases de efecto invernadero de la industria de la moda provienen de la producción y el procesamiento de materias primas. Por lo tanto, evitar la creación de productos desde cero puede ser un gran impulso para reducir las emisiones.
Cambios en las preferencias de consumidores
Reasor menciona que el re-comercio y las compras de segunda mano están cambiando los comportamientos de los consumidores hacia un consumo más sostenible. Y las empresas pueden aprovechar esta tendencia para fomentar la conciencia ambiental y educar a los consumidores sobre los beneficios de la reventa.
El re-comercio promueve el consumo sostenible al hacer que los consumidores consideren la segunda mano como una opción más respetuosa con el medio ambiente. Loop, por ejemplo, se asocia con la aplicación EcoCart para ofrecer educación sobre reducciones de carbono y permitir a los consumidores contribuir activamente a la neutralidad de carbono.
Los últimos informes sobre los impactos negativos de la moda desechable en países como Chile y Ghana resaltan la necesidad de aumentar la circularidad en la industria, en la que todas las formas de compras de segunda mano contribuyen. Los modelos de re-comercio optimizan estas contribuciones y permiten escalar el impacto positivo.
Dadas las predicciones de que el crecimiento del re-comercio será enorme en los próximos años y ha crecido en los últimos, es poco probable que la reventa sea una tendencia de corta duración. La sostenibilidad se ha unido al precio, valor, calidad y estilo como una fuerza económica en el comercio minorista. Es una oferta demasiado buena para dejar pasar.
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