Quino: Su legado responsable
por Corinna Acosta
A los 88 años de edad en su
natal Mendoza, Argentina, el dibujante Joaquín Salvador Lavado Tejón
se bajó del mundo un 30 de septiembre.
Quino se ha ido, pero Mafalda se queda.
El célebre publicista creó
a esta niña de cabello abultado en 1962, como parte de una serie de
ilustraciones para una campaña de lavadoras y refrigeradores de la marca
Mansfield. Nunca imaginó que el personaje en cuestión se convertiría en un
ícono; bautizado más tarde por Umberto Eco como
una heroína de nuestro tiempo.
Mafalda no
es solamente un personaje de historieta más; es, sin duda, el personaje de los
años setenta. Si para definirla se utilizó el adjetivo ‘contestataria’, no es
sólo para alinearla en la moda del anticonformismo. Mafalda es una verdadera
heroína ‘rebelde’, que rechaza el mundo tal cual es.
Umberto Eco
Quino, llamado así desde pequeño para distinguirlo de su tío
Joaquín, fue hijo de padres españoles que migraron a Argentina en 1919. durante
más de diez años dibujó a Mafalda que hoy se ha transformado en su legado más
valioso para el mundo.
El 25 de junio de 1973 abandonó la tira que ya había pasado por
periódicos de todo el mundo y libros traducidos en más de 25 idiomas. Argumentó
que las ideas se le habían agotado.
Hoy, Mafalda y sus amigos sobreviven al fallecimiento del
legendario dibujante y desde la tinta y el papel, sin duda lloran la muerte de
quien les diera vida.
Tiras memorables de
Mafalda con sentido social
Amparado en la inocencia de Mafalda, Quino lo cuestionó todo. El
sistema capitalista, los gobiernos, la sociedad de consumo, el sexismo, el totalitarismo
y todos los males “ismos” del mundo. De entre todos los personajes maravillosos
que alegran infancias, esta pequeña es quizá una de las más entrañables.
La tira, que narró la vida cotidiana y las reflexiones de esa
hija de un típico matrimonio de clase media argentino, vio la luz en el
semanario Primera Plana, en 1964. El personaje se convirtió rápidamente en un
éxito y su primer libro de compilaciones se agotó en cinco días.
Esta pequeña nacida en Argentina hace ya unos 56 años sin duda
ha trascendido fronteras de tiempo y espacio para albergarse en las mentes y
corazones de los habitantes del mundo a lo largo de una gran cantidad de
generaciones.
Rival de la sopa y amiga de la radio, esta pequeñita es fanática
de cuestionarlo todo de forma tan dulce como irreverente, dos características
que además de hacerla memorable, la convierten en todo un ícono de la
caricatura argentina y de la crítica social.
Seguramente Mafalda continuará robando sonrisas por mucho tiempo
más, porque así es esta chica: testaruda, valiente, sabía, crítica y
definitivamente memorable.
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